Las empresas ya aplican medidas para mejorar la sostenibilidad de sus envases y, a su vez, reducir costes de producción gracias al ecodiseño y a las técnicas innovadoras de envasado y embalaje. El uso de materiales reciclados y de fuentes renovables, la simplificación y reducción de peso de los embalajes son algunas de las medidas  que apuestan por la sostenibilidad de los envases. Una prueba de esto, por ejemplo, es que el peso de los envases de yogur con el tiempo se ha reducido un 11% y las botellas de agua son de plástico reciclado, más ligero, de origen renovable y están diseñadas para facilitar su reciclaje y maximizar el aprovechamiento del producto.

 

Dentro de la Semana Europea de la Prevención, Ecoembes presentó los resultado de su V Plan de Prevención correspondiente al periodo 2012-2013 donde se plasma que un total de 2.385 empresas, 11 más que en estudios de años anteriores, han desarrollado o utilizado más 6500 medidas para reducir el impacto ambiental y apostar por un desarrollo sostenible, sin olvidar los beneficios económicos. La mayoría de estas medidas se han centrado en reducir el peso de los envases y se ha conseguido en un 16% menos de media.

 

Otro punto fuerte es la eliminación de tintas o metales pesados en el embalaje de productos, embalajes que cada vez son más ligeros ya que se han eliminado envases innecesarios, a su vez se utilizan con mayor frecuencia materiales reciclados para elaborar nuevos productos.

 

La implantación de estos planes en las empresas se traduce en beneficios ambientales inmediatos y en la reducción del impacto sobre el planeta. Durante 2012 y 2013 se ahorraron 54.000 toneladas de materias primas, 1.260.000 MWh de energía y 6.800.000 m³ de agua, evitando además la emisión de 134.000 toneladas de CO₂ a la atmósfera.

 

Otro ejemplo del esfuerzo que se realiza para optimizar el diseño es el programa “Diseñar para reciclar” que permite realizar un estudio y un diagnóstico de cualquier envase y detectar aspectos mejorables para el proceso de recogida, selección y reciclaje.

 

Sin duda el mejor residuo es el que no se genera y el que no hay que reciclar, por eso es tan importe apoyar el ecodiseño que promueve la sostenibilidad, reduce la huella ambiental de los envases y desde 1999 ha permitido ahorrar unas 420.000 toneladas de metrias primas.

 

En cuanto a los sectores en los que se desarrollan estas medidas, el más activo sin duda ha sido el sector de la alimentación, que acapara el 81% del total de actuaciones de ecodiseño y sostenibilidad en los envases, seguido por el cuidado personal y del hogar (11%), equipamiento del hogar (5%), el sector textil y piel (2%) y, finalmente, el sector de motor y ocio (1%).

 

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